Corvus corax canariensis |
En peligro de extinción por la mala fama que los acompaña (hábiles rateros, muy inteligentes y negros) han sido considerados pájaros de mal agüero desde hace siglos y perseguidos con saña.
Como cuenta Cesar Palacios en su blog <<La crónica verde>> las actas del Cabildo de Fuerteventura de abril 1773 ya lo dejaban muy claro: “Entendido el daño que causan los cuervos en las criaciones y sementeras [acordaron] se libren despachos circulares para que cada vecino traiga cuatro cabezas de cuervo en cada mano en todo el mes de agosto, so pena de cuatro reales cada uno, que se les sacarán irremisiblemente”.
Quedan ya pocas parejas en la isla de La Palma y existen serios problemas para incrementar su número, para facilitar la cría. Unas veinte parejas sobreviven en el Parque Nacional de la Caldera de Taburiente y a su histórico problema de convivencia con los humanos se ha añadido el moderno problema del turismo. Estos cuervos casi se han convertido en una atracción turística más. Merodean alrededor de turistas y trabajadores de las baterías de telescopios a los que se acercan sin miedo ninguno esperando unas migajas.
Esta última foto es de uno de los bancos con las vistas más hermosas en el que me he sentado jamás, en "el mirador de la Cumbrecita" donde un precioso ejemplar se me acercó y me dejó "retratarlo" a
placer aunque (pienso que haciendo más bien que mal) no le regalé
ninguna golosina como creo que esperaba.
Magníficas fotos.
ResponderEliminarGracias Isabel. Me alegra que te gusten.
Eliminarbuena serie benjamin.felicidades
ResponderEliminarGracias Juan.
EliminarFantásticas fotos y texto. Mi enhorabuena.
ResponderEliminarFantásticas fotos Benjamín, se me olvido comentarte que te ibas a divertir con los cuervos y veo que así fue. Muy buenas.
ResponderEliminarUna serie magnífica Benjamín y con el añadido de los comentarios explicatorios.
ResponderEliminarBuena serie Benjamín, sobretodo el "pájaro" que está haciendo la foto al otro pájaro. jajaja.
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