Una estampa soberbia. El nublado que se intuye en el ambiente, ese tono de los árboles y el propio fondo; a pesar de ser una arboleda tupida, le dan al protagonista "vida en su entorno". El color del pelaje del ciervo, esa majestuosidad de la postura y esas piedras a modo de "plataforma o pedestal" hacen de la foto un perfecto cuadro. De la calidad ni hablo, es sobradamente conocida.
Pedazo de ciervo Antonio. Enhorabuena. Una foto estupenda. Un abrazo.
ResponderEliminarBuen macho y buena foto, supongo que las condiciones de luz no eran las mejores.
ResponderEliminarUn saludo.
Una estampa soberbia. El nublado que se intuye en el ambiente, ese tono de los árboles y el propio fondo; a pesar de ser una arboleda tupida, le dan al protagonista "vida en su entorno".
ResponderEliminarEl color del pelaje del ciervo, esa majestuosidad de la postura y esas piedras a modo de "plataforma o pedestal" hacen de la foto un perfecto cuadro. De la calidad ni hablo, es sobradamente conocida.
Pues ésta por sí sola, ya merece la pena desplazarse hasta allí . Enhorabuena Antonio y un abrazo.
ResponderEliminarMe alegro por ti, pues ya tienes a "tu ciervo". El año próximo intentaremos nuevas fotografías.
ResponderEliminarUn abrazo
Yo repito que el tema y la foto son impactantes. Mi felicitación, Antonio.
ResponderEliminarPues a pesar de que el fondo no te ha ayudado mucho, la foto es estupenda, como dice Ricardo parece una estatua en su pedestal.
ResponderEliminarUn abrazo
Preciosa foto de este espectacular ciervo. Enhorabuena
ResponderEliminarHas pillado un buen macho me gusta como te ha quedado,felicidades.
ResponderEliminarEspectacular ese macho Antonio. Mi enhorabuena.
ResponderEliminarTocayo magnífica foto en todos los sentidos de este cérvido de once puntas.
ResponderEliminarSaludos